Un veredicto impactante resonó en los pasillos del Tribunal Criminal Nº 1 cuando un hombre de 46 años fue sentenciado a 18 años de prisión por un conjunto de siete delitos, incluyendo abusos sexuales contra sus propias hijas menores de edad.
La resolución, emitida por la justicia este martes, envía un fuerte mensaje sobre la intolerancia hacia la violencia y el abuso infantil en la sociedad.
El individuo enfrentó cargos de "coacción agravada" en dos ocasiones, "abusos sexuales en perjuicio de menores" en dos ocasiones, y la "tenencia ilegal de armas de fuego, de guerra y de uso civil" en tres casos diferentes.
Los hechos que llevaron a esta sentencia se remontan a episodios ocurridos en un domicilio ubicado en la calle 14 al 3200 de la ciudad de Necochea, de acuerdo con la investigación policial y judicial.
La noticia de la condena se hizo pública después de un intenso debate oral en el Tribunal Criminal Nº 1, donde los jueces Mirta Cuadrado, Luciana Irigoyen Testa y Aldo Rau emitieron su veredicto de manera unánime. Esta decisión judicial arrojó un fuerte contraste con la solicitud inicial del fiscal a cargo del caso, Marcos Bendersky, quien había abogado por una pena de 30 años de prisión para el acusado por los siete delitos que pesaban sobre él.
En su resolución, la jueza Mirta Cuadrado declaró: “Antes de iniciar el tratamiento probatorio de cada hecho, y a los fines de evitar sorpresas en el desarrollo de mi voto, adelanto que daré curso a la hipótesis del Ministerio Público Fiscal, a cargo del agente fiscal Marcos Bendersky y daré por probado que el individuo, ha sido autor penalmente responsable de todos delitos acusados”.
La magistrada continuó: “Los analizaré en el orden en que fueron acusados y descriptos en la requisitoria de elevación a juicio, aclarando además que los agruparé teniendo en cuenta la naturaleza de los mismos y su ocurrencia fáctica”.
“Es decir, en primer lugar, hecho 1 y hecho 2 (coacción agravada), luego los surgidos en el allanamiento realizado en el domicilio del acusado: hecho 3, hecho 4 y hecho 5 de tenencia ilegal de arma de fuego de guerra y de uso civil, y finalmente, los abusos sexuales cometidos contra sus hijas menores de edad, identificados como hecho 6 y hecho 7”, dijo. Este enfoque sistemático permitió que los hechos se presentaran de manera organizada en el juicio, ofreciendo una visión clara de la serie de delitos cometidos por el acusado.
El acusado, ahora condenado, permanece recluido en la cárcel de Villa Floresta, Bahía Blanca, cumpliendo su pena.
Fuente: Diario4V
