Con algunos cruces entre las distintas bancadas, el Concejo Deliberante dio por concluida la Emergencia Hospitalaria en el distrito de Balcarce.
Este jueves por la noche se desarrolló la 18º y última sesión ordinaria anual del Honorable Concejo Deliberante (HCD) del partido de Balcarce. Con un orden de 27 puntos, uno de los temas a debatir fue el proyecto de ordenanza presentado desde el oficialismo para darle curso al fin de la emergencia hospitalaria en el área del servicio de clínica médica del centro de salud local, que se encontraba vigente desde el mes de junio de 2022. Este proyecto de ordenanza surgió luego de que desde el Frente de Todos (FdT) presentaran una moción para crear un "Comité de crisis" en el ámbito municipal, a instancias de un reclamo que habían presentado personalmente en el legislativo profesionales de la salud afectados a tareas sanitarias dentro del Hospital Municipal "Felipe Fossati", entre médicos, enfermeros y administrativos.
En dicha oportunidad, los trabajadores de la salud habían pedido al cuerpo del Concejo Deliberante en su conjunto, entiéndase un reclamo al oficialismo y a la oposición por igual, una reunión para detallar diversos problemas que estaban atravesando en el hospital. Allí, en el marco de la Comisión de Salud, solicitaron se tomen cartas en el asunto luego de haber agotado instancias de reclamos que incluyeron al Ejecutivo, atento a diversas "irregularidades" que estarían ocurriendo dentro del nosocomio, como cobros indebidos de haberes, tareas remuneradas no cumplidas y faltante de insumos, entre otros. En una de estas reuniones al director del hospital Gabriel Angelini se le había preguntado, además, sobre los alcances y beneficios en todo orden obtenidos a través de la emergencia hospitalaria vigente, a lo que consideró como una medida positiva.
Desde el bloque del Frente de Todos, una vez presentado el último martes el proyecto de ordenanza por parte del oficialismo para finalizar dicha emergencia, decidieron no acompañar la moción debido a que la misma no había sido discutida previamente en la respectiva Comisión de salud, además de no ser una medida coherente con la apreciación manifestada por los médicos días atrás.
“El 23 de octubre, al otro día de las elecciones, (los médicos que reclamaban) se reunieron con el bloque oficialista sin avisarnos, y ahora nos llega este proyecto de ordenanza que ni siquiera lo presenta el intendente, lo trae Facundo Lazo”, expresó Sol Di Gerónimo, quien aseguró que el Jefe comunal “quiere quedar bien con todos y sin poner la cara”. La concejala de la oposición recordó que “cuando Esteban Reino era concejal, junto con Francisco Ridao, cada vez que surgía una inquietud en materia de salud o seguridad, exigían al entonces intendente que se hiciera presente en el concejo para dar explicaciones. Ahora resulta que no hay que molestarlo: a ustedes (el oficialismo) les molesta que alguien se anime a realizar una crítica, eso a ustedes los pone locos”, acusó la titular del FdT, agregando que "el ladrón piensa que todos son de su misma naturaleza, pero sepan que no todos somos lo mismo: nosotros no actuamos así".
Este jueves fue la última sesión ordinaria del 2023. |
Por el lado del oficialismo, Gonzalo Scioli (Juntos) fue quien tomó la posta. Osadamente, y probablemente queriendo sacar provecho de que en el recinto de sesiones como pocas veces ocurre había una gran cantidad de público, hizo uso de un recurso populista en términos de comunicación, expresando no poder creer cómo desde las bancas opositoras se estaba “mintiendo para la tribuna con un relato de ficción”. Asegurando que la oposición sí estaba al tanto de las reuniones a mantenerse con los profesionales de la salud, el edil intentó argumentar su arremetida diciendo que la emergencia declarada en 2022 no había sido dictada por motivos económicos sino por falta de recurso humano. “La oposición sólo busca un título trascendente, y lo único que quiere es tener la razón”, consideró.
Repercusiones y respuestas
Desde el Frente de Todos, haciendo lectura del acta de la reunión de la Comisión de Salud del legislativo, se defendieron diciendo que si esa hubiese sido la intención “habríamos ido a los medios a difundir las cosas que dijeron los médicos y que constan en el acta firmada”, donde los profesionales de la salud hicieron acusaciones como el cobro de haberes por tareas u horarios no cumplidos, además del faltante de insumos. Di Gerónimo, presidenta saliente del bloque, reprochó que el oficialismo haya recurrido a ciertas maniobras de manipulación cuando no hacía falta. "Cuando ustedes nos trajeron el proyecto de la emergencia, recuerdo que nosotros nos dimos cuenta que estaban dibujando datos porque necesitaban guita para pagarle a los médicos, pero bueno entendimos que era necesario", reconoció.
Graciela Pilone (FdT) en su intervención remarcó la importancia y necesidad de que como legisladores cada concejal tenga en claro que se debe velar por la salud y el bienestar de la comunidad de Balcarce, brindando soluciones independientemente de las diferentes posturas y acciones políticas partidarias. Acerca del proyecto que se debatía, la edil argumentó su negativa explicando que el médico clínico Guillermo Arislur afirmó el pasado 9 de noviembre que, aún con emergencia sanitaria y hospitalaria, era necesario cubrir cargos que continuaban vacantes. "Es muy peligroso el hecho de pensar en levantar la emergencia sin que estén dadas las condiciones, nosotros vemos que desde ese 9 de noviembre a la fecha no se han modificado", expresó.
A su turno Martín Pérez (FdT) refutó las expresiones de Scioli diciendo que "en ningún momento se faltó a la verdad desde este bloque", aclarando que el oficialismo utiliza "juegos de palabras" para confundir. El edil opositor explicó que si bien en las oportunidades que miembros de la Asociación de los Profesionales de la Salud confirmaron su asistencia, se avisó a los bloques "menos de dos horas antes, durante un día que no correspondía al de reunión de la Comisión de Salud, cuando muchos de nosotros ya teníamos otros compromisos". Pérez volvió a confirmar lo expresado por sus pares de bloque asegurando que todo lo manifestado fue vertido en un acta por los mismos médicos y firmado por ellos. "Los que trataron de mentiroso al director del hospital, los que lo acusaron por incumplimiento de sus deberes, los que dijeron que hay irregularidades en los pagos son ellos, no nosotros, y sin embargo ninguno de nosotros hizo público lo que quedó plasmado en esa acta", dijo Pérez. Concluyó su intervención, dado que la emergencia le permite tanto al Ejecutivo como a la dirección del hospital hacer un uso discrecional de los fondos en función de las demandas coyunturales, solicitando al bloque oficialista que "si al conflicto lo quieren solucionar, diciendo como se dijo recién que los médicos cobran lo que tienen que cobrar, páguenles lo que se les tiene que pagar, con o sin emergencia".
Aunque en esta sesión sólo se mencionó desde el FdT que la prisa por avanzar en la finalización de la emergencia hospitalaria tendría alguna relación con el reclamo de los profesionales de la salud, no se dijo que pocos días después de la presentación por parte de la oposición solicitando la implementación del Comité de Crisis, los mismos trabajadores sanitarios (algunos pocos de ellos, en realidad) bajaron la intensidad del reclamo, incluso manifestando que "se exageraron algunos conceptos", tal vez olvidando que el reclamo ya figuraba rubricado en un acta del Concejo Deliberante. Entre medio hubo conversaciones entre los profesionales de la salud y el Ejecutivo, y días después la resolución por el conflicto generado con trabajadores municipales, muchos con tareas laborales en el hospital, a raíz de la negociación unilateral con el Sindicato de Trabajadores Municipales (STM) por la cual reclamaban desde distintos sectores que se había resuelto "a espaldas de los trabajadores", tal como acusaron desde la Asociación de los Trabajadores del Estado (ATE).
Como ocurre con cada bajada de línea del Municipio hacia su bloque mayoritario del legislativo, con votación dividida el fin de la emergencia hospitalaria fue aprobado por los 12 votos del oficialismo, y rechazado con 6 votos de la oposición.