Iowa, a pesar de su población modesta de 3,2 millones de habitantes, desempeña un papel significativo al ser el escenario del primer round de las primarias desde hace 50 años. Aunque ganar en este estado no garantiza el triunfo final, puede ser crucial para reducir el número de contendientes y establecer el impulso necesario para la siguiente fase de la carrera.
Según los sondeos, Trump se perfila como el ganador indiscutible en Iowa, pero la atención se centra en la competencia por el segundo lugar. La exgobernadora de Carolina del Sur y exembajadora ante la ONU, Nikki Haley, y el gobernador de Florida, Ron DeSantis, se encuentran en un acalorado enfrentamiento por el segundo puesto, según las encuestas.
El sistema de votación en Iowa, a través de asambleas de electores afiliados al partido, es particular y añade un elemento distintivo a la competencia. Aunque los resultados en Iowa no son determinantes, el candidato que logre un buen desempeño recibirá atención mediática, atraerá donantes y ganará impulso para la próxima fase de la contienda.
A pesar de los desafíos logísticos del sistema de caucus, con votaciones en asambleas que pueden verse afectadas por condiciones climáticas adversas, Iowa sigue siendo un indicador relevante para medir la viabilidad de un candidato en estados posteriores. Este año, la competencia republicana en Iowa parece centrarse en quién ocupará el segundo lugar y se consolidará como la alternativa principal a Trump.
Además de la carrera electoral, Trump enfrenta desafíos legales con causas pendientes, incluida una por difamación presentada por la escritora Elizabeth Jean Carroll. Aunque el ex presidente enfrenta acusaciones judiciales, su popularidad entre los votantes republicanos parece inquebrantable, según las encuestas.
La votación en Iowa es solo el inicio de una intensa temporada de primarias, con fechas clave en el horizonte, como el "supermartes" en marzo, que incluirá votaciones en varios estados decisivos. La Corte Suprema también jugará un papel importante al analizar las apelaciones de Trump relacionadas con su exclusión en las primarias de Colorado y Maine debido a su papel en el asalto al Capitolio en 2021.