El ministro de Economía dijo que la inflación está "colapsando" y advirtió que a las prepagas "se les recontra fue la mano con los aumentos".
El ministro de Economía, Luis Caputo, expresó este viernes por la noche un mensaje optimista al afirmar que la situación económica es mejor de lo que se pronosticaba. A pesar de que un preocupante porcentaje de la sociedad (y en aumento) directamente no llega a fin de mes, destacó que la inflación de marzo se ubicó en torno al 10%, y señaló que este indicador está mostrando signos de desaceleración, especialmente en rubros como alimentos y bebidas, donde se ha observado una deflación en la primera semana de abril según datos de supermercados.
Caputo explicó que parte del incremento de la inflación se debe a que los comerciantes fijaron sus precios considerando un dólar de $2,000, basándose en pronósticos de consultoras económicas. Sin embargo, consideró que muchos comercios están optando por no solo mantener los precios sino bajarlos nominalmente, como se ha visto en el caso de la carne que ha vuelto a los niveles de diciembre y en algunos casos incluso ha descendido.
El ministro también abordó el tema de las empresas de medicina prepaga, señalando que han mantenido reuniones para abordar los fuertes incrementos de precios en los últimos meses y afirmó la necesidad de promover la competencia en este sector.
Por otro lado, en relación al impuesto a las Ganancias, adelantó que el piso mínimo no estará en 1.2 millones como proponía el Ejecutivo en su proyecto de reforma fiscal, luego de una reunión con gobernadores aliados.
Aunque para el común de la sociedad que atraviesa una realidad funesta además de inverosímil se trata de algo irrelevante, Caputo resaltó los logros alcanzados en los primeros meses de gestión, mencionando el equilibrio fiscal, las intervenciones del Banco Central en el mercado cambiario y la resolución de gran parte de la deuda comercial con importadores. Afirmó que estos resultados positivos demuestran que el país está en un camino de cambio, aunque reconoció que aún queda trabajo por hacer.